Alertan que habría riesgo en funcionamiento de río Biobío: Acusan obstrucción de ingreso a central Panque
Por medio de una declaración pública, la Junta de Vigilancia de la Cuenca del Río Biobío señaló que existe preocupación por cómo se estaría afectando el normal funcionamiento de dicho afluente.
Dicha junta está encargada de la gestión integrada del agua y que alberga las comunidades que beben, producen y usan el agua del río, en cualquier forma,
Señalaron que su preocupación se debe a “la irregular operación de la central hidroeléctrica Pangue debido a la obstrucción de ingreso de los trabajadores de la empresa. Es nuestro deber alertar a las autoridades y a la población en general que esta situación pone en evidente riesgo a los distintos sectores productivos que dependen directamente del normal escurrimiento del agua en el río Biobío y, muy especialmente, el abastecimiento de agua potable a la mayor parte de la población de la región”.
Añadieron que “creemos necesario que se ponderen adecuadamente los riesgos de esta situación irregular la que, de provocar una falla de operación de la central Pangue, limitaría las descargas a menos de 35 m3/s lo que podría tener entre otras, las siguientes.
Alertan consecuencias
Afirmaron que, esto último, traería consecuencias. Entre ellas, poner en riesgo a toda la población de la ribera del río, incluso algunos centros poblados cercanos al mismo, al no poder controlar adecuadamente los caudales de una eventual crecida de invierno.
También indicaron que dicha situación podría afectar a más de 900.000 personas, cuyo abastecimiento de agua potable depende de cotas de extracción que podrían verse afectadas en las comunas de Santa Bárbara, Hualqui, Chiguayante, Santa Juana, San Pedro de la Paz y Concepción.
En la misma línea, señalaron que se podría “poner en riesgo la estabilidad del sistema eléctrico nacional, debido a la detención obligada de las centrales Ralco y Angostura, lo que compromete un bloque de generación de unos 1500 MW”.
La Junta de Vigilancia de la Cuenca del Río Biobío sostuvo, a través de su comunicado, que lo que denuncian también afectaría “a más de 3000 agricultores debido a la imposibilidad de extraer agua por medio de las bocatomas de varias organizaciones de regantes. Comprometer la productividad de empresas de distintos rubros (…) y afectar gravemente el ecosistema fluvial”.
Agregaron que “invitamos a nuestras autoridades a tomar todas las acciones necesarias tendientes a terminar, en el más breve plazo, con esta intervención de la central hidroeléctrica Pangue que pone en serio riesgo a la comunidad y usuarios del río, a la población de la región y a toda la nación”.
La declaración está firmada por el presidente de esta junta, Juan Enrique Vallejos. Se finalizó indicando que “nuestra organización está disponible para ayudar a superar esta situación a la brevedad y contribuir a dar la seguridad a los requerimientos sociales, medioambientales y productivos que la cuenca demanda”.