Ex comandante Izurieta reconoció haber desviado gastos que financiaban a la familia Pinochet
El ex comandante en jefe del Ejército y ex subsecretario de Defensa, Óscar Izurieta, reconoció haber desviado gastos reservados para financiar a la familia de Augusto Pinochet.
Al ex militar se le investiga por malversación de caudales públicos y falsedad de documento militar por el uso de gastos reservados. La resolución de su procesamiento sostiene que admitió una serie de delitos en entrevista con la ministra Romy Rutherford, que investiga el arista de fraude en el Ejército.
De acuerdo a lo precisado por La Tercera PM, la magistrada detalló que Izurieta admitió el desvío de dineros que tenían como fin actividades de inteligencia. El ex militar le reconoció a Rutherford que en su mandato se usaron para mantener a la familia de Augusto Pinochet.
"En sus primeros años parte de los recursos de gastos reservados iban al general Pinochet y su familia. Afirma que el general Pinochet gastaba mucha plata, porque era una persona que mucha gente hubiese querido que muriera antes de su muerte natural", sostiene el procesamiento.
Izurieta sostuvo que se trataba de un general "que había que cuidar" y derivó en que había que “tener personal a su disposición, como médico, enfermeros, escoltas", y que “todo eso generaba muchos gastos".
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Sin embargo, el ex militar señaló que tenía una justificación. Le dijo a la jueza que estaba "amparado en el decreto supremo que avalaba custodiar a los excomandantes en jefe". Dicho decreto, conforme a lo sostenido por Izurieta, lo firmó Presidencia entre 1994 y 1996.
El vínculo con la familia Pinochet fue con la Comandancia Guarnición del Ejército de la Región Metropolitana, dató el citado medio. "Se encargaba de mantener todo el sistema de escolta, salud y apoyo de la gente que custodiaba y atendía al general Pinochet", dice el procesamiento.
También se contó con la declaración del exsecretario general del Ejército, Andrés Avendaño. Él señaló que "pagó placas, arreglos y trabajos de la placa funeraria, todo relacionado con la muerte del general Pinochet".
Esto incluyó el uso de gastos reservados para comprar una placa conmemorativa para ponerla al interior de la Escuela Militar. Sin embargo, se desechó la idea y no se instaló, pese a que se había comprado.
De acuerdo a la jueza Rutherford, Izurieta también reconoció que "a veces la señora del general Pinochet (Hiriart) lo llamaba solicitando ayuda económica y reconoce que le entregaba los recursos o se los enviaba con alguien". De hecho, sostuvo que "quizá ocurrió en dos ocasiones en que le entregó 1 millón".
