Más de mil salmones muertos arribaron al Biobío: se usarán como materia prima para harina y aceite
Más de 3.500 toneladas de salmones se vieron afectadas por floraciones algales nocivas en Aysén. Por lo mismo, tras reportar mortalidades masivas fueron retirados en su totalidad.
A la Región del Biobío, arribaron dos pesqueros de alta mar provenientes de la región de Aysén, con especies salmonídeas afectadas por las floraciones algales nocivas (FAN) a comienzos de mes.
Las empresas afectadas son Blumar S.A., Salmones Austral S.A, Camanchaca y Aquachile S.A. A lo anterior se suma un centro de la empresa Mowi Chile S.A. que activó su plan de contingencia por mortalidad masiva asociada a bajas de oxígeno. En concreto, la biomasa afectada (mortalidad) era de 3.550 toneladas.
Según indicaron, el retiro se realizó en "condiciones óptimas" mediante sistemas de ensilajes. Indican que los salmones se trasladaron sin signos evidentes de descomposición, con destino a plantas reductoras, según lo establecido en los planes de contingencias.
Al respecto, entregó más detalles, Iván Oyarzún, director regional de Sernapesca Biobío. "Los PAM Erika y Duqueco, arribaron a Talcahuano hace unos días y realizaron en completa normalidad el proceso de descarga de 1.353,98 toneladas en la planta Landes; para posteriormente derivar la carga en camiones herméticos a la planta de elaboración". Esto, para utilizarlos como "materia prima para confección de harina o aceite, evitando que se destinen como desechos".
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Además, señaló que la región está preparada para apoyar estas situaciones. Todo "dentro del marco de los protocolos establecidos por el Reglamento Ambiental para la Acuicultura".
"Para este tipo de procedimiento existen protocolos establecidos en la Declaración de prealerta acuícola contenida en el Reglamento Ambiental de Acuicultura, y por eso estamos coordinados con la Autoridad Marítima, la Superintendencia de Medio Ambiente y la Seremi de Salud” agregó Oyarzún.
Finalmente, desde Sernapesca indicaron que mantendrán la vigilancia en la zona mediante sistemas de monitoreo satelitales, remotos, cruce de información y presencial; manteniendo la alerta a los cambios climáticos que pudieran modificar la condición ambiental actual.