Acusan a joven de asesinar a su madre y practicar canibalismo
Un joven acusado de canibalismo en Madrid, España, enfrenta 15 años de cárcel luego de confesarle a la policía que asesinó a su madre por estrangulamiento, a quien además cortó en trozos para comérsela junto a su perro.
Según consignó la revista People en Español, Alberto Sánchez Gómez, de 28 años, vivía junto a María Soledad Gómez, de 68, en un apartamento ubicado en el barrio La Guindalera, cerca de la popular plaza de toros Las Ventas. A pesar de que estuvo un tiempo trabajando como camarero, actualmente se encontraba sin empleo.
La razón que esgrimió el joven de por qué cometió el hecho, esto en su declaración a las autoridades cuando se le arrestó el 21 de febrero de 2019, fue que unas voces en su cabeza le impulsaron a cometer el macabro crimen.
En esa misma línea, Alberto Sánchez explicó que algunas de las voces que escuchaba en su cabeza correspondían a las de sus vecinos y familiares, e incluso algunos famosos. Sin embargo, aseguró que no recuerda nada de lo que sucedió.
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Intentó esconder el cuerpo
Casi un mes después de que fuera asesinada, una amiga reportó a la mujer como desaparecida. A raíz de ello, la policía decidió acercarse hasta la residencia de María Soledad Gómez, pero sólo se encontraron con su hijo.
De acuerdo a lo que consignó The Sun, cuando Alberto se acercó a la puerta para abrir a los oficiales, que preguntaron por la mujer de tercera edad, les dijo: “Sí, mi madre está aquí, muerta”.
Finalmente, el joven camarero terminó por confesar a la policía que se había estado comiendo a su mamá “pedazo a pedazo” con su perro durante quince días.
Una vez dentro del apartamento, los investigadores dieron con los restos de la mujer guardados en contenedores plásticos dentro del congelador y los huesos escondidos por el lugar.
Los documentos judiciales en torno al caso describen que “el acusado trasladó el cuerpo de su madre al dormitorio y lo puso sobre la cama con el objetivo de hacer desaparecer su cuerpo”, cortándolo en pedazos con un serrucho y los cuchillos que estaban en la cocina.
“Había restos de sangre por la casa, otros en la ducha y en la nevera, en distintos contenedores”, comentó uno de los agentes que entró a la vivienda.
El joven empezó a sufrir de alucinaciones en su adolescencia
Desde los 13 años que Sánchez consumía drogas y a pesar de que su hermano intentó rescatarlo de ello, comenzó a escuchar voces y a sufrir alucinaciones cuando tenía 16.
“Llevaba mucho tiempo enfermo y me refugié en las drogas. Había estado escuchando voces durante mucho tiempo y tenía alucinaciones. Todo esto me llevó a lo peor que me ha pasado en la vida”, confesó el joven en una carta que redactó desde prisión.
Antes del asesinato, la madre del joven obtuvo una orden de restricción, por lo que este comenzó a pasar más tiempo en la calle y en la casa de otros parientes o conocidos. Sin embargo, Soledad tras sentir lástima por su hijo, le permitió volver al apartamento donde residía.
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