Hansel Silva Vásquez, Director Corporación Aldea Rural: “La única manera de levantar la actividad cultural es vía Ley de Donaciones Culturales y el aporte de la empresa privada”
La ley de donaciones culturales, es un mecanismo que fomenta la intervención privada, tanto de empresas como de personas, en el financiamiento de proyectos artísticos, patrimoniales o culturales.
Durante en medio de la pandemia esta alternativa se ha convertido en un pilar fundamental para la continuidad de espectáculos de índole cultural, ¿pero de qué se trata esta ley?.
Esta iniciativa beneficia tributariamente a quien done dinero o especies para financiar la ejecución de un proyecto cultural. El mismo debe ser previamente presentado y aprobado por el comité Calificador de Donaciones Privadas para obtener un descuento de impuestos, como crédito y/o como gasto tributario, dependiendo de quién sea el donante.
Dicho beneficio resulta ser muy beneficioso para las empresas, quienes podrán rebajar la donación del impuesto a la renta de primera categoría de que declaren su renta efectiva sobre la base de contabilidad completa esto incluso se tenga perdida tributaria, del impuesto global complementario, aunque contribuyente no lleve contabilidad completa, del impuesto único de segunda categoría, del impuesto a la herencia y del impuesto adicional, en sí este beneficio se traduce a descontar el 50% de la donación de la base imponible del impuesto de la renta y a la vez el restante 50% puede descontarlo directamente del impuesta a la renta a pagar.
Ante ello grandes empresas han visto esta una excelente oportunidad para contribuir a la realización de grandes espectáculos que han marcado la pauta en la escena nacional como por ejemplo Santiago a Mil, actividades de la Corporación Cultural de los Artistas del acero, la recordada actividad Concepción en mil palabras y ciento de actividades más.
Hacer cultura en pandemia
Ante la contingencia y los recortes presupuestarios en materia cultural, es que esta iniciativa cobra real importancia.
Es así como varios directores de Galerías, Salas de Artes y centros culturales han realizado un energético llamado incentivando a las diferentes empresas de la región del Biobío a ser partícipes y colaborar con la industrial cultural teniendo en consideración los cientos de proyectos que se encuentran en estado de aprobado y con recaudación abierta para la recepción de fondos.
Uno de ellos es el reconocido director de la Corporación Aldea Rural quien esta a cargo del Ex Cine Windsor, Hansel Silva Vásquez quien comenta lo siguiente:
"Para la industria cultural la participación de la empresas privadas ha sido fundamental para el mantenimiento a actividades culturales en nuestra región, si bien es cierto son muchas quienes han mostrado real interés de colaborar en proyectos que generan un impacto positivo en nuestro país”.
Corporación Aldea Rural
La Corporación Educacional Aldea Rural nació el año 2008, ante la necesidad de proteger bienes de alto valor cultural, así como también la de mantener tradiciones, sobre todo, de zonas rurales de la región del Biobío, en un contexto de globalización, donde éstas tienden a diluirse y menospreciarse.
La Corporación comenzó su trabajo en el pueblo de Rere, comuna de Yumbel, con la recuperación de una casona que hoy es el Museo Casa Cano de Rere, legado Bicentenario del Gobierno de Chile año 2014. Con los años ha extendido su trabajo desde Santiago hasta Temuco.
Actualmente, la Corporación financia sus actividades gracias a la Ley de Donaciones Culturales y a los aporte de empresas privadas y se dedica a recuperar, impulsar, preservar y difundir obras u otras actividades culturales mediante la restauración y conservación del patrimonio, investigaciones, publicaciones y exposiciones fijas e itinerantes.
Además, otorga becas estudiantiles a jóvenes de áreas rurales, como una manera de incentivarlos y apoyarlos en su formación profesional. Junto a esto mantiene convenios de cooperación y trabajo en conjunto con municipios desde Santiago a Chiloé y Fundaciones internacionales en Latinoamérica.
En el año 2016 la Cámara de Comercio de Concepción premio a la Corporación por su aporte a la reconstrucción patrimonial del Biobío.
En Agosto del año 2017, la Fundación Proyecta Memoria y el Gobierno Regional del Biobío otorgó el Premio AMA a la organización por su aporte a mantener vivo el patrimonio regional.
A su vez se encuentra impulsando el Museo de la Memoria del 27-F en la localidad costera de Coliumo, Tomé. Actualmente a través del Museo Cano de Rere es miembro de la Asociación de Museos Privados de Chile, que es parte del registro de Museos de la DIBAM.
En año 2020 impulsa el Proyecto “Lázaro” destinado a recaudar fondos vía Ley de Donaciones Culturales para la preservación del Parque Pedro del Rio Zañartu de Concepción.
También y junto al Archivo Histórico de Concepción se han editado libros de interés patrimonial como “Santuario de San Sebastián de Yumbel” y Museo Casa Cano de Rere con gran éxito.