Salas artísticas y culturales se aprestan a recibir público tras el término de la cuarentena obligatoria
Hace algunas semanas, recintos situados en comunas que salieron de la fase 4 se preparan para recibir público, siguiendo estrictas normas sanitarias.
Con el levantamiento de la cuarentena obligatoria en varias comunas del país, la actividad comercial se toma un respiro y empieza a recibir clientes de nuevo. A pesar que la medida se levantó, el covid-19 sigue estando presente, por lo que es necesario reiterar las precauciones sanitarias de las cuales se viene insistiendo desde marzo de este año, siendo las principales el uso de mascarillas, guantes y el distanciamiento social.
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De la misma forma en que el comercio regresa a una actividad cercana a la “normalidad”, las salas y centros culturales también lo están haciendo, tras más de un mes de confinamiento obligatorio en los hogares.
Ante esto, ya se preparan parrillas programáticas y se adecúan los recintos en conformidad a lo establecido por la autoridad para poder recibir al público.
Centro cultural Ex Cine Windsor
Uno de los ejemplos de esto último es el centro cultural Ex Cine Windsor, administrado por la corporación Aldea Rural, y que se encuentra en pleno centro de Concepción, una comuna que hace pocos días salió de la cuarentena obligatoria.
Hace varias semanas la entidad desarrolla un trabajo con un equipo multidisciplinario para preparar la recepción de visitantes, en vista a una pronta exhibición de la obra del artista ecuatoriano Oswaldo Guayasamín.
Para poder concretar la reapertura, se distinguen varias medidas y acciones que se han tenido que considerar. Una es limitar la capacidad máxima de personas en los espacios de la sala, además de diferenciar y señalizar las entradas y salidas del edificio en cuestión.
También marcar las distancias mínimas que deben tener los asistentes entre ellos y la entrega constante de alcohol gel y el uso permanente de mascarillas.
La cultura y las artes es una de las áreas más golpeadas por la pandemia, por lo que recibir público será un alivio para quienes administran y trabajan en estos recintos, siempre cumpliendo con las instrucciones y protocolos aprobados por la autoridad sanitaria.
