En prisión preventiva quedó banda que asaltaba camiones de Coca Cola: peoneta informaba rutas
En prisión preventiva quedó este mediodía un hombre, formalizado por cuatro delitos de robo con intimidación. El imputado integraba una banda delictual de 8 miembros, quienes asaltaban camiones repartidores de la empresa Coca Cola Embonor S.A, en Ñuble.
“Con esta detención suman siete los formalizados, quedando sólo uno por detener, quien ya está identificado. Los cabecillas están en prisión preventiva. Porque además están siendo investigados por otros robos e incluso, uno por un homicidio cometido en Chillán”, destacó el fical Pablo Fritz.
El persecutor explicó que la banda criminal obtenía información de las rutas de recaudaciones y del dinero que portaban los conductores. Para ello utilizaban información que aportaba uno de los integrantes, quien era peoneta en uno de los camiones.
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Para asaltar los camiones de Coca Cola, la banda actuaba con armas de fuego, encapuchados y con el apoyo de vehículos.
A la agrupación se le investiga por una decena de hechos cometidos entre enero y febrero de este año. En cuatro de los cuales se acreditó la participación de todos, con la sustracción para la empresa de más de 10 millones de pesos.
“Con estas detenciones logramos poner fin al fenómeno delictual que afectaba a estos camiones repartidores”, destacó el fiscal Pablo Fritz.
Acotó que “se logró, desde la perspectiva del análisis criminal, un resultado importante si consideramos que los sujetos cubrían sus rostros. Se cuidaban mucho de no ser identificados por parte de las víctimas. Por lo tanto, la individualización surge del análisis de movimiento de vehículos por GPS, por ejemplo”.
Pericias de la PDI
El comisario Manuel Quijada Cáceres, de la Brigada Investigadora de Robos (Biro) de la PDI, resaltó que “la investigación de meses realizada por los detectives logró la individualización de los integrantes de la banda que tenía como modus operandi el arriendo de vehículos por aplicaciones para seguir a camiones distribuidores de bebidas e intimidar a los choferes violentamente, con el fin de sustraer las recaudaciones de pago de proveedores”.
Afirmó que “el trabajo investigativo de los detectives continúa para dar con el paradero del último de los involucrados”.
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