La vinculación con el medio en tiempo de crisis

Complejos son los días que vivimos como país. Nadie puede desconocer que desde octubre de 2019 las dinámicas sociales por medio de las cuales acostumbramos a relacionarnos han devenido en escenarios donde la desconfianza parece ser un constante punto de partida.

Esto, complejiza aún más el enfrentar hoy una situación tan única como es una pandemia a nivel mundial.

La confianza, como tal, es un elemento central para el desarrollo de los territorios por sus múltiples beneficios en diversos ámbitos: en lo económico, como un potente motor de crecimiento que abre la posibilidad de generar emprendimiento e innovación; en lo político, como un generador de estabilidad institucional, diálogo democrático y civismo; en lo social, permitiendo estimular la cooperación y asociatividad, el capital y la cohesión social.

Así, resulta esencial recuperarla tanto en lo individual como en lo colectivo, y las universidades no podemos sentirnos ajenas a este desafío.

Las capacidades instaladas al interior de nuestras instituciones nos abren la posibilidad de contribuir a cimentar nuevas dinámicas relacionales a través de nuestra función de vinculación con el medio.

Pero para ello, es importante replantearnos cómo seguiremos llevando adelante nuestra interacción con el medio externo frente a esta nueva realidad de distanciamiento social.

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Resulta así fundamental establecer relaciones horizontales y colaborativas, en espacios institucionales formales y estables de co-construcción y transmisión de conocimientos compartidos con los ciudadanos, todo esto soportado en herramientas digitales simples, dinámicas y de fácil acceso.

Cobra suma importancia que avancemos con celeridad en abrir espacios virtuales de interacción. Estos, nos permitirán comprender de manera más integral los nuevos desafíos que estamos enfrentando desde lo social, económico y ambiental, sobre todo con las localidades más apartadas a nuestras capitales regionales.

Así también, nos abrirán la posibilidad de dar respuestas a las nuevas problemáticas de manera más pertinente, por medio de la generación de nuevos conocimientos y la co-creación de soluciones innovadoras desde los territorios, con las personas y las organizaciones públicas, privadas y de la sociedad civil, con sus recursos endógenos y sus capacidades locales.

Hoy más que nunca resulta vital nuestra función de vinculación para acercar a la comunidad, de manera simple y digital, la amplia gama de saberes y capacidades incubadas al interior de nuestras instituciones de educación superior.

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