Un trabajador de 34 años de San Pedro de la Paz denunció una golpiza la tarde noche del domingo, antes del toque de queda, y tras haberse juntado con un primo y un amigo en la rotonda del sector Olas, por una patrulla de infantes de marina.

Claudio Jarpa, denunciante, señaló que tras la junta, llegó una patrulla e inició una fiscalización a los vehículos en los que se encontraban.

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“Bajé los vidrios del auto y me pidieron que me pusiera la mascarilla. Por el otro lado, otro (infante) me pidió que descendiera de forma prepotente, alterado. Me pidió que abriera el maletero y la tapa para la rueda. Le pedí que alumbrara con algo. Me dijeron que era choro y al cerrar la puerta a puño cerrado me pegó en la nariz. Sentí que me la había quebrado”, indicó.

Jarpa agregó que “me llevaron para el lado de la playa, hicieron arrodillarme y uno me pegó con el fusil en la cabeza. Me dijeron que me iban a matar y que si querían, me hacían desaparecer, me pegaron en las costillas y más combos. Me dijeron que subiera al auto y que me fuera”.

Cuando logró salir,antes de las 21:00 horas, concurrió a denunciar lo sucedido aCarabineros.

Luego constató lesiones en que se acreditó la fractura de nariz.

Todo fue denunciado al Instituto Nacional de Derechos Humanos en el Biobío, razón por la que se confirmó una querella por el delito de tortura.

Carolina Chang, directora del INDH Biobío, confirmó que el episodio de la golpiza y dichos de los infantes de marina "por las amenazas que recibió posteriormente, porque lo golpean y lo llevan a la playa y lo amenazan con desaparecerlo y eso efectivamente lo que hace es inhibir la voluntad de la víctima y con eso se configura el delito".

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El contraalmirante Carlos Huber, jefe de la Defensa Nacional en el Biobío, señaló que “efectivamente la noche del domingo ocurrió un incidente y todos los antecedentes al respecto fueron puestos a disposición de la Fiscalía”.

No precisó cuál es la condición actual de los cinco infantes presuntamente implicados.

Desde la Fiscalía de Concepción, se confirmó el inicio una investigación para esclarecer los hechos a cargo del fiscal Nelson Vigueras.

A través de un comunicado, Fiscalía indicó que el persecutor penal “ya inició la realización de diligencias y trabajará junto al equipo especial de la PDI para casos de DD.HH”.