Aumentan profesionales de salud para reforzar prevención y monitoreo del COVID-19

La Seremi de Salud del Biobío, dio a conocer un incremento de profesionales para reforzar la estrategia de prevención y monitoreo de COVID-19 en la Región.
La medida establece una dotación de 7 epidemiólogos, 8 Técnicos en Enfermería, 4 profesionales y 8 técnicos para apoyo en Sanidad Marítima y 1 servicio médico.

“Estamos reforzando la estrategia de prevención y monitoreo por COVID-19 en la región, a través de la contratación de 7 epidemiólogos, 8 Técnicos de Enfermería, 4 profesionales y 8 técnicos para apoyo en Sanidad Marítima y 1 servicio médico, a objeto de poder responder de forma eficiente ante casos confirmados, seguimiento de contactos, acciones de control sanitario para puntos de entrada al país en la región y desarrollo de procesos formativos a servicios públicos, organizaciones y comunidad en general”, declaró el Seremi de Salud del Biobío, Héctor Muñoz.

Los puntos de entrada corresponden al Paso Pichachén (Antuco), Aeropuerto Carriel Sur y 9 Terminales Portuarios. “Ya empezamos hace alrededor de 2 a 3 semanas a trabajar principalmente en apoyo a los puntos de entrada al país, en la preparación de la comunidad antes de la llegada de casos confirmados, con capacitaciones y la vigilancia epidemiológica de los casos que ingresaron al país de seguimiento por sospecha”, indicó Daniela Araneda, Profesional de Epidemiología en apoyo a trabajo COVID-19.

Además del recurso humano se contrataron 3 vehículos para movilización expedita de los equipos.
Es preciso recordar que la vía de transmisión de la enfermedad es a través de gotitas provenientes de la tos o estornudo de una persona a otra, facilitado por factores como vivir bajo el mismo techo, compartir la misma sala en un hospital, viajar en el mismo transporte o cuidar a un enfermo sin las debidas medidas de prevención.

Están más expuestos quienes viajen a países o zonas con casos confirmados o brotes activos, y/o que tengan contacto cercano con enfermos. Las medidas de prevención están dadas por cubrirse la nariz y boca al estornudar o toser con pañuelo desechable (nunca con la mano), lavado frecuente de manos y tras haber estado en contacto con una persona enferma.

Los síntomas consideran fiebre sobre 38° grados, tos y dificultad respiratoria, los que se pueden agravar si no se tratan a tiempo.