Murió “Popeye”, el sicario y mano derecha de Pablo Escobar
- Este jueves se confirmó la muerte de Jhon Jairo Velásquez Vásquez, más conocido como “Popeye”, el jefe de los sicarios y mano derecha del narcotraficante colombiano Pablo Escobar.
Velásquez, de 58 años y asesino confeso, estaba hospitalizado desde el pasado 31 de diciembre de 2019 y padecía un cáncer de esófago en fase terminal", según indica el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) en un comunicado.
El jefe de los sicarios de Escobar se desempeñó desde su juventud, como el principal asesino a sueldo del Capo de la droga colombiano.
“Popeye”, quien ejecutó y dio las órdenes durante el periodo de operación más sangriento del denominado 'cartel de Medellín', en la década de 1980 que dejó miles de víctimas.
No obstante, fue capturado en mayo de 2018 y en febrero de 2019 la fiscalía ordenó su prisión por su coautoría en el asesinato del director del diario El Espectador, Guillermo Cano, en 1986.
Además, se le relacionó con los homicidios del ex candidato presidencial Luis Carlos Galán; el ex procurador de la Nación, Mauro Hoyos, e incluso el de su propia pareja, tras una orden recibida por el propio Escobar.
Velásquez fue uno de los colaboradores más cercanos de líder del cartel de Medellín. Aunque la justicia le atribuyó su responsabilidad en cerca de 300 asesinatos, él mismo reconoció que estuvo involucrado de forma indirecta en 3 mil muertes vinculadas al crimen organizado.
Fue detenido en 1991 y estuvo en la cárcel durante 24 años. En 2014, tras una polémica decisión, recibió la libertad condicional, siendo detenido nuevamente cuatro años más tarde.
Cercanía con Chile y apoyo a Piñera
Jhon Jairo Velásquez ganó popularidad como youtuber e incluso entregó sus visiones sobre la elección presidencial de Chile en 2017.
Fue entonces cuando Popeye dio su “apoyo” a Sebastián Piñera, llamando a los chilenos a votar por por el candidato de Chile Vamos para así “evitar el avance del comunismo”.
Además, en el mismo video advirtió que la candidatura “comunista” de Alejandro Guillier estaba “movida por el narcotráfico”.
“Los comunistas aman tanto a los pobres que los multiplican, los comunistas están acabando con el mundo (…) si Chile cae en manos del comunismo, Chile está muerta, totalmente muerta en abismo”, sostuvo.