Jojo Rabit: cómo una comedia satírica se convierte en pura emoción
Hace algunas semanas se dieron a conocer los nominados en distintas instancias, en lo que es la llamada temporada de premios. Y en todos, se hace presente Jojo Rabit. Entonces, decidí descubrir por cuenta propia el por qué tanto revuelo con esta apuesta.
La película está ambientada en Alemania, donde vemos al pequeño Johannes “Jojo Rabit” de 10 años, un niño bastante solitario pero seguidor ferviente de las Juventudes Hitlerianas. Su imaginación traspasa toda lógica, pues su amigo imaginario es nada más ni nada menos de Adolf Hitler.
No existe una explicación lógica de la admiración de este niño por la figura de Hitler. Su madre, interpretada magistralmente por Scarlett Johansson, es una esforzada matriarca quien lucha día a día por mantener a su hijo a salvo. Sin embargo, ella no pertenece al movimiento Hitleriano y ayuda, a escondidas del pequeño, a una joven judía.
Ahí, Jojo Rabit juega un papel fundamental, donde logra acercarse a la joven, conocerla y vencer sus prejuicios. La película dura casi dos horas y hay que destacar la gran actuación del joven actor. Todo un personaje, que lejos de odiarlo, se hace tan cercano con su humor negro y satírico. Es increíble que gran parte de la película se centra solo en él. Interesante cómo logra olvidar sus prejuicios, mientras se involucra cada vez más con la joven que se esconde en su propia casa. Ellos comienzan a conversar y a interactuar. Además de generar un vínculo.
Pese a ser una película humorística, donde la mayor parte del tiempo vas a reír, existe un quiebre que llega repentinamente al espectador. Sin ánimos de spoiler, les puedo contar que si ven esta película no se van a arrepentir. Muy merecida cada nominación que tiene.
¿Termina con un final feliz?, bueno, eso depende de la perspectiva de cada espectador. Pues, finalmente, hay que analizar cada minuto del filme, para ver con qué te quedas. Te aseguro que si vas al cine o inviertes tiempo en verla, no te vas a arrepentir.