Verano entretenido en Chiguayante: Realizan taller para niños de Leonera
Fotografía:

Verano entretenido en Chiguayante: Realizan taller para niños de Leonera


Por Marcelo Ramírez | 13 Enero 2020 08:14
COMPARTIR

Hasta el 17 de enero se realizará en la Escuela Balmaceda Saavedra de Leonera, en Chiguayante, un taller de verano para niños y niñas, la mayoría en condición de vulnerabilidad, como parte del proceso desarrollado por el Programa Acciona Mediación.

Durante estos días se han realizado clases de cerámica y un taller de producción de textos e ilustración, través de la metodología de fanzines, con la artista visual Sandra Marín, el que permite que ellos mismos publiquen pequeñas producciones editoriales, en esta oportunidad basada en la cosmovisión de la cultura mapuche.

La Seremi de las Culturas, Carolina Tapia indicó que “nuestro objetivo es que los niños y niñas se diviertan de manera sana, y también aprovechamos de aportar en el desarrollo de sus capacidades de escritura y de lectura, que son esenciales en la etapa de formación. De esta manera, a través del vínculo entre las artes visuales y el lenguaje, promovemos un aprendizaje vivencial con una metodología lúdica y participativa”.

La base del taller está sustentada en Educación Artística, que va más allá de la enseñanza de alguna disciplina, ya que implica también un desarrollo de capacidades sociales, mejora la autoestima y amplia el horizonte de posibilidades de los menores.

La artista visual Sandra Marín, de Estudio Repisa, impartió el taller tanto a niños como a los educadores, e indicó que “la importancia de este proceso es formar multiplicadores, aquí estoy transfiriendo un conocimiento que consiste en cómo trabajar, a través de la editorial, procesos constructivos con los niños que pueden ser aplicados desde la ciencia, al arte, la tecnología y, sobre todo, las relaciones humanas y el crecimiento de la imaginación”.

La artista destacó que los fanzines se vinculan con la auto publicación o la autoedición, para expresar algo a través de un producto editorial hecho por uno mismo y que puedes compartir o atesorar.

“Es una herramienta educativa muy efectiva, no sólo para niños, ya que también se puede utilizar para diversos rubros profesionales, como en la medicina o el arte colaborativo, con adultos mayores que quieran destacar su historia. Armar un libro pone en valor lo que hay adentro, y si los construyes tu mismo te dan ganas de moverlo y se transforma en un dispositivo comunicatorio”, precisó.

ETIQUETAS: