Todos debemos
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Todos debemos


Por Andrés Espinoza | 01 Enero 2020 23:15
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Posiblemente muchos tendrán esa sensación de agobio y tristeza por como terminó el año, pero de todas las conversaciones de pasillo, en los encuentros de empresas o en las reuniones familiares se pueden rescatar algunos aspectos que quizás nos ayuden a visualizar puntos de partida.

Hay un reconocimiento a que lo que gatilló el 18 O tiene mucho que ver con asuntos económicos, pero principalmente con ese ninguneo escandaloso y sistemático a que las autoridades políticas y económicas sometieron al país.

Los “patipelaos”, el “salgan de mi lago” o el “compren flores que están baratas”, fueron gotitas que rebasaron un vaso lleno de abusos y de una impunidad clasista soportada en una red tejida por años entre políticos y empresarios corruptos. Todos estábamos “chatos” de tanto ninguneo en la forma, pero también en el fondo, ese que no quería solucionar, contra toda evidencia, los problemas denunciados por años.

También la crisis ha permitido darnos cuenta con quién realmente estábamos hablando. Creo que a todos nos ha ocurrido que creíamos que una persona era inteligente, tranquila o capaz y en medio de la crisis se ha comportado en forma errática, violenta y sin ningún ánimo constructivo. Muchos que se veían como especiales han mostrado lo peor de ellos, justificando la violencia e incluso llamando a continuar con la destrucción como fórmula correcta para conseguir avances, evitando los puntos de encuentro o las soluciones. A ellos conviene enfrentarlos, porque su violencia en RR.SS es similar a esas minorías que continúan con actos violentos en las calles.

Muchos ya coinciden que hay que dejar de ver las cosas en blanco y negro. Esa polaridad es la fórmula que usan los grupos extremistas inventando cifras, noticias falsas y cuanta tontera se les ocurre. Y contra eso hay que aportar todos los datos duros y muchos estudios que demuestran que Chile está mejor que hace 30 o 40 años y vivimos mejor que muchos países con los que nos comparan. Hacer RT y dar likes es fácil, pero hoy se requiere un mayor grado de responsabilidad, para no alimentar esa polarización ridícula.

Hay también un principio generalizado de mea culpa debido a la poca o casi nula participación que hemos tenido en los asuntos públicos y en la política contingente. Hemos dejado a cargo del Estado a muchas personas absolutamente incompetentes, a los “parientes de”, los “amigos de” o simplemente a operadores políticos apuntalados por caudillos locales, sin reconocer el daño que hacíamos al país al no pelear por esos cargos. Hubo, por décadas, un abandono de lo público por los más capaces e ilustrados que prefirieron mirar para el lado creyendo que todo seguiría funcionando igual sin importar quien estaba a cargo. La cuenta ya esta pasada; y no hay líderes ni liderazgo. Y la culpa es nuestra.

Por último, todos creen que debemos exigir mucho más a las autoridades, sobre todo en transparencia y en disminuir la corrupción. Es mejor tener gente decente a cargo que muchos genios corruptos. Las pensiones, la salud, la educación, los remedios y tantos otros urgentes temas tienen fórmulas para mejorar en la medida que se planteen las metas y se fijen estrategias de cómo lograrlo. Por años no se avanzó producto que hemos tenido autoridades corruptas que han actuado de la mano con los poderes económicos que solo buscaban obtener beneficios monopólicos. En vez de fiscalizar y corregir las fallas del mercado han preferido asociarse sin importar el bien común y dejando de cumplir el rol de autoridad.

Hoy es el momento de la gente, de todos nosotros, de la mayoría silenciosa, como a algunos les gusta llamar. Pero es nuestro momento no para cualquier cosa ni para darnos ‘gustitos’, sino que para hacernos cargo en forma responsable de nuestro país. Sin miedo, sin temores, todos podemos construir un país mejor y mirar el futuro con optimismo. Pero todos debemos aportar.

Las opiniones vertidas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de www.sabes.cl El Diario Digital del Gran Concepción.

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