Destacadas mujeres penquistas que cambiaron el curso de la historia
Fotografía: Sociedad Damas Universitarias y Amanda Labarca

Destacadas mujeres penquistas que cambiaron el curso de la historia


Por Antonio González | 08 Marzo 2019 10:15
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En este 8M el Archivo Histórico de Concepción recuerda el aporte de las mujeres penquistas, en ámbitos tan diversos como el político, social, cultural, económico, educativo, científico, ha sido amplio, pero no siempre se ha reconocido suficientemente. Por este motivo, es justo destacar a algunas de las tantas mujeres que han contribuido al progreso de Concepción y la región. Así, se recuerda, a mediados del siglo XIX, a Rosario Ortiz (1827-¿?), precursora del periodismo femenino. Escribía artículos en los diarios El Correo del Pueblo y la Revista del Sur bajo la firma de "La Monche". Se relacionó con la política al ser una activa partidaria de la campaña presidencial de José María de la Cruz, en el año 1851. Al ser derrotado por Montt, este se levanta en armas, y Rosario decide alistarse como viandera y participó en la batalla de Loncomilla. Se dice que se batió heroicamente con fusil en mano en el combate y le salvó la vida al General De la Cruz en los momentos en que iba a ser atacado. Posteriormente se enrola con las tropas rebeldes de Juan Alemparte en la Revolución de 1859. Eloísa Urrutia, por su parte, fue una destacada educadora y fundadora de un Colegio que llevó su nombre. En 1892 abrió para la juventud femenina un establecimiento educacional en donde podrían adquirir las armas intelectuales para enfrentarse a las contingencias del diario vivir. Fue el primer liceo particular femenino de la época y contó con un equipo de veinticuatro profesoras distribuidas entre Kindergarten, preparatorias y humanidades. En 1897 se constituyó una Academia Literaria que fue presidida por Eloísa, en donde las alumnas que tenían afición a las letras podían cultivarla. Esta academia fue nombrada Mercedes Marín del Solar, en homenaje a la poetisa y educadora nacional. Carmela Romero, educadora y filántropa, fundó y dirigió en 1896 un colegio que llevó su nombre y desde el año 1929 se dedicó silenciosamente a distribuir su fortuna en obras de caridad y bienestar social, como la Ciudad del Niño Ricardo Espinosa, para el cual donó el terreno, y fundó el Conservatorio de Música Enrique Soro, entre otras obras. Leonor Mascayano Polanco (1903-1944), si bien su origen es angolino, dejó un legado importante en la zona penquista. Fue la promotora y forjadora de dos grandes iniciativas: la Sociedad Protectora de la Infancia (1902) y el Hospital de Niños (1915), que junto a otras destacadas mujeres de Concepción logró sacar adelante. Fundó, además, la Casa de Luz (1926), entidad dedicada a amparar y educar a personas con ceguera. En la beneficencia destacaron, además, Jerónima Urrutia Mendiburu y Manzano, quien legó al Hospital San Juan de Dios una enorme fortuna; Juana Paula Urrejola, que cedió los terrenos para la construcción de la Casa de Asilo de la Providencia; María Urrejola, que entregó una suma considerable para que se estableciera el Colegio Salesiano; y Mercedes Cavero Egúsquiza, benefactora del Hospicio de Concepción. Destacadas mujeres penquistas fundaron instituciones como la "Gota de Leche", que replicó en Concepción la obra que Juana Ross había iniciado en Santiago, destinada a aliviar la desnutrición y falta de alimentos en los infantes hijos de la clase obrera; "La Hormiga", que protegía el trabajo de la mujer obrera; "La Providencia", que enseñaba oficios prácticos para ganarse la vida, entre otras instituciones. En otro ámbito, se puede encontrar mujeres como Corina Vargas (1900-1989), la primera mujer nombrada como Decana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Concepción y Luz Vivaldi, odontóloga e investigadora, precursora de programas de salud bucal y primera mujer en ocupar un decanato en el área de la salud en el país, cuando fue nombrada como Decana de la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Laurencia Contreras (1907-1997), fue una mujer renombrada en el arte musical. Integró la primera promoción de concertistas penquistas en piano, quienes obtuvieron su título en el Conservatorio Nacional de la Universidad de Chile. Trabajó en el Conservatorio de Concepción y, en 1940, funda el Conservatorio Laurencia Contreras. Fue una destacada educadora, autora de un Silabario Musical ilustrado para niños y recibió diversas distinciones a lo largo de su trayectoria, por su labor formativa de varias generaciones de niños y jóvenes. Recibió el Premio Municipal de Arte, y fue nombrada Vecina Ilustre de la ciudad de Concepción, entre otros reconocimientos. En la política, destacan mujeres como Inés Enríquez Frodden (1913-1998), Intendente de Concepción y la primera mujer en la historia política chilena en ser elegida para ocupar un asiento en el Congreso, como diputada por Concepción, en el año 1951. Desarrolló una ardua labor en pro de la reivindicación y conquista de derechos para las mujeres. También en la política, Ester Roa Rebolledo (1919-2010) fue alcaldesa de Concepción por dos periodos consecutivos. Realizó diversas obras de adelanto para la ciudad, como la erradicación de las viviendas de emergencias que se establecieron en el Parque Ecuador luego de los terremotos, la construcción del Estadio Regional de Concepción, obras para dotar de infraestructura de servicios a los sectores periféricos de la ciudad, obras de mejoramiento en las poblaciones y una serie de reformas dentro de la municipalidad. Como es posible ver, grandes cambios y progresos han tenido lugar gracias a la labor de diversas mujeres. aunque muchas han quedado omitidas en este breve espacio, no hay que dejarlas en el olvido.
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