¿Cómo puede la música influir en nuestro rendimiento deportivo?
Fotografía: estudio revela que la música que escuchas cuando corres puede aumentar tu resistencia hasta un 15%

¿Cómo puede la música influir en nuestro rendimiento deportivo?


Por Sergio Fuentes | 15 Agosto 2018 12:45
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Al igual que en nuestra vida cotidiana, al momento de practicar algún deporte, la música juega un papel vital en el dominio de estos. De hecho, es común ver que los atletas al ingresar a la arena de competición, llevan puesto los auriculares. La música provoca ciertos sentimientos y emociones según la situación. Entonces, ¿cómo se aplica esto específicamente al deporte?
La música o las canciones que escuchas influyen de manera directa en tu rendimiento cuando corres o realizas otro tipo de actividad deportiva. Una investigación científica ha revelado cinco formas claves en que la música puede influir en la preparación y las actuaciones competitivas:

Disociación:

Escuchar música puede desviar nuestra atención de lo negativo hacia lo positivo, lo que reduce la percepción del sobre esfuerzo. La disociación efectiva promueve los aspectos positivos del estado de ánimo (por ejemplo, el vigor y la felicidad), mientras que los aspectos negativos (por ejemplo, la tensión, la ira) se reducen.

Regula nuestro estado de excitación:

La excitación se refiere al grado de ansiedad y se manifiesta tanto en factores físicos como psicológicos. La música altera la excitación emocional y fisiológica y puede usarse antes de la competencia o el entrenamiento para calmar los sentimientos de ansiedad. Un ejemplo de ello es la atleta británica Dame Kelly Holmes, quien confesó que escuchó baladas de Alicia Keys en su rutina previa al evento en los Juegos Olímpicos. Por otro lado, los atletas pueden usar canciones más optimistas para sentirse más energizados y emocionados.

Sincronización:

El tempo o los beat de la música también puede tener un efecto en nuestro movimiento. El tipo de música que se escucha puede hacer que una persona sincronice sus movimientos. Por lo tanto, si un atleta escucha una canción con beats rápidos, es probable que aumente sus movimientos a un ritmo más rápido, posiblemente mejorando su rendimiento (por ejemplo, ciclismo o carreras). Del mismo modo, si un atleta requiere movimientos más lentos y más elegantes (patinaje artístico), entonces la música más lenta podría ayudar a un rendimiento óptimo.

Habilidades motoras:

La música puede transportar nuestro cuerpo a través de patrones de movimiento efectivos. La música también puede promover la motivación intrínseca. Su uso en un entorno de aprendizaje puede hacer que el ambiente sea más divertido para los jugadores y ayude a promover el aprendizaje. [caption id="attachment_32995" align="aligncenter" width="640"] Owen Wright[/caption]

Fluidez:

Este es un estado en el que durante la actividad física, la mente y el cuerpo funcionan con "piloto automático" con un mínimo esfuerzo consciente. Investigacions han demostrado que las intervenciones que incluyen imágenes y música pueden mejorar el rendimiento deportivo al desencadenar emociones y aspectos cognitivos asociados con el desempeño deportivo. Otro estudio, realizado en Australia, el cual duró cinco días, indicó que el pop es el mejor estilo de música que puedes escuchar para mejorar superar tus límites si practicas running. El heavy metal y el rock le siguen. Por otro lado, los estilos catalogados como los menos indicados y que serian menos aconsejados son el reggae, la música clásica y la ópera. Es por esto que los psicólogos deportivos aconsejan a los atletas que usen la música como una herramienta en la preparación para competir. Ya sabes, ¡A preparar tu playlist!
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