Controlado se encuentra incendio forestal que afecta a dos sectores de Cabrero

Controlado se encuentra el incendio forestal que desde ayer domingo afecta a la comuna de Cabrero, principalmente a los sectores El Progreso y Charrúa. Durante esta tarde, dos brigadas terrestres de CONAF, y recursos de Forestal Mininco iniciarán las faenas de liquidación. La superficie afectada se estima en 360 hectáreas de vegetación menor y bosques de pino adulto. El incendio se inició ayer pasadas las 13:00 horas y fue originado por dos focos distintos, en predios forestales, que finalmente se unieron debido al rápido avance de las llamas. Producto de esto último, y por la amenaza a viviendas, la Intendencia del Biobío, en coordinación con ONEMI y la Corporación, declaró Alerta Amarilla para la Provincia de Biobío. El Director Regional de CONAF, Sergio Valdés, informó que al momento de informarse a la Central de Operaciones sobre este incendio, la Corporación despachó de inmediato cinco brigadas y un helicóptero para concentrar las labores de control en el sector El Progreso donde existía proyección del fuego hacia la población. “Los cuidados principales fue obviamente proteger primero las viviendas cercanas y la central eléctrica Charrúa, las que finalmente no fueron alcanzadas por las llamas”, precisó. Respecto al origen de este incendio, el directivo indicó que “no es tan sencillo saber dónde se inició ni quién lo inició, o cómo se provocó. Es un tema que se verá más adelante una vez controlado y extinguido el incendio”. En lo que va de esta temporada 2017-2018, en la Región del Biobío se han registrado 85 incendios forestales, un 27% menos que el período 2016-2017. “En la región, este es el primer incendio de magnitud y que nos advierte un poco sobre llamar a la comunidad en tener mucho más responsabilidad en el cuidado y en la prevención para evitar que ocurra algo similar”, subrayó Sergio Valdés. En cuanto al segundo incendio que se registra desde ayer domingo en la región, ubicado en el sector Cura, comuna de Tirúa, este ya está controlado, afectando una superficie de 80 hectáreas, principalmente de desecho agrícola y forestal, y vegetación menor. En el lugar trabajan en su extinción dos brigadas terrestres de CONAF.