Las posturas de parlamentarios del Biobío para legislar sobre la “Ley Guga”

Cuando Gustavo “Guga” Ortiz sufrió en agosto pasado el accidente mientras entrenaba para una competencia de descenso en Whistler, Canadá, la noticia causó alto impacto. De forma paralela su familia preocupada por su recuperación puso en el tapete un tema: el seguro de los deportistas chilenos en el extranjero.

Gustavo Ortiz, padre de Guga, cuando retornó a Chile comenzó una campaña para que en Chile se legisle y proteja a los deportistas nacionales que representando al país en el extranjero estén asegurado en caso que sufran un accidente que los deje fuera de competencia para siempre, como ocurrió con su hijo.

Consultado el diputado Jorge Ulloa, dijo que ve con buenos ojos aquello y cree que hay campo, tal como ocurrió hace algunos años cuando legislando sobre la ley de bomberos se incluyó un seguro en caso de accidentes.

“Claramente se puede buscar, se puede explorar una fórmula porque estamos hablando de personas que salen al extranjero a representar a Chile, por lo tanto a mi me parece una alternativa absolutamente viable. Hay opciones, hay posibilidades y es nuestro deber hacerlo” narró el diputado por el puerto.

Una visión similar, pero apegada estrictamente a la coyuntura política tuvo el diputado José Miguel Ortiz. Es posible, pero los tiempos del calendario legislativo no dan para que se tramite en la actual administración.

“Todo puede ser, pero también no es una afirmación porque eso es poco serio. Hay que ver y analizar. No hay que olvidar que estamos al término de un Gobierno y en materia legislativa nos quedan poco menos de 4 meses”, cerró el diputado José Miguel Ortiz.

Para tener una idea de plazos legislativos; en los últimos 25 años han habido 2 proyectos de ley que se crearon y aprobaron en un día y fue cuando un partido político llegó tarde a inscribir a sus candidatos al Servel y se quedó sin postulantes dando vida a una ley express. Sincerando los tiempos, una ley en Chile requiere de acuerdos y comisiones que en promedio demoran un semestre completo, por lo que, a menos que sea una instrucción explicita de la presidenta y todos los sectores estén de acuerdo, se podría impulsar y aprobar en plazos acotados, pero, recién es una idea.