Solicitarán que Aduanas se querelle contra responsable de contrabando de máquinas de azar en el Biobío
Fotografía: Referencial

Solicitarán que Aduanas se querelle contra responsable de contrabando de máquinas de azar en el Biobío


Por Andrés Espinoza | 30 Noviembre 2018 19:36
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El senador Alejandro Navarro llegó hasta la Fiscalía Regional del Biobío para denunciar el delito de contrabando por ingreso ilegal de máquinas traga monedas al país, sin embargo, minutos antes fue informado que por disposición legal solo Aduanas se puede querellar y solicitar diligencias, por lo tanto confirmó que pedirá al Ministro de Economía, José Ramón Valente, que instruya a la oficina local de Aduanas para presentar la querella respectiva. La semana pasada un total de 56 máquinas traga monedas que tenían como destino el nuevo casino de Marina del Sol en Chillán, Región de Ñuble, fueron descubiertas ingresando de contrabando al país por el puerto de San Vicente en Talcahuano ya que de un total de un lote de 64 importadas desde Estados Unidos, solo 8 fueron declaradas, evadiendo un total de 25 millones de pesos en impuestos. En cuanto a los hechos, Navarro dijo que “uno se puede equivocar, pero no puede equivocarse en traer 64 y declarar ocho, no cuadran ni los números, éste no es un error de tipeo, además la cantidad es enorme”. Por tal motivo, añadió que “yo me pregunto, y espero que la Fiscalía investigue cuántas máquinas han ingresado de la misma manera, porque se elude el impuesto pero no sabemos el número de máquinas y dónde han ido a parar”. Por lo inicialmente expuesto, legalmente no puede actuar una querella por parte del senador hasta que la Fiscalía tenga avances en la indagatoria, por lo tanto recalcó que “esta investigación es necesaria, esto tienen que aclararlo las propias instituciones, los casinos y de forma paralela e irrenunciable la Fiscalía”. Cabe recordar que el receptor de estas máquinas es el Casino Marina del Sol, que serían destinadas a Chillán, y que una vez en conocimiento, a través de un comunicado apuntaron que “insinuar que un error como este pudiese ser intencional es absolutamente mala fe”.
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