Cintas chilenas se llevaron los aplausos en la última noche de BioBioCine.
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Cintas chilenas se llevaron los aplausos en la última noche de BioBioCine.


Por Sergio Fuentes | 26 Abril 2018 13:42
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El Festival Internacional BioBioCine concluyó su sexta versión la noche del sábado en el Teatro Biobío. La ceremonia final partió con la celebración de la diversidad sexual con la presentación de Samantha Price, transformista penquista que realizó un show acompañado con un sistema de proyección y la coreografía de tres transformistas, incluyendo a Samantha, y un elenco de 27 bailarines sobre el escenario.

La ceremonia de premiación comenzó con las obras en competencia de la selección de Cortometraje Ficción, donde el jurado estuvo compuesto por Sebastián Piñeyro, Rebeca Gutiérrez y Vladimir Rivera. “Paula”, del director uruguayo Juan Ignacio Enciso, fue la ganadora en esta categoría. Sebastián Piñeyro, en representación del festival de cine nuevo DeTour, entregó un premio a la obra del director chileno Gonzalo Díaz Oyola “Fletas, sucias, pero ni tan malas” que le permite ser parte de la selección de dicho festival. En esta misma categoría, la Distribuidora de Cine Independiente (DCI) entregó también un premio a “Hombre eléctrico” del director Álvaro Muñoz. Rebeca Gutiérrez, jurado del festival y productora de la DCI, comentó que el premio “consiste en estrenar el cortometraje junto con un largometraje del catálogo de la Distribuidora de Cine Independiente durante el 2018 en salas alternativas de cine”. Vladimir Rivera, también miembro del jurado, realizó una mención especial a “Sacrilège” del director suizo Christopher M. Saber. Finalmente, en esta categoría, se hizo el reconocimiento a Mejor Cortometraje Chileno al director César González Álvarez con “Nado de invierno”. En la categoría Largometraje Ficción, Nicole Bonilla, Daniel Candia y Esmeralda Vivas fueron los jurados. La película de Niles Atallah, “Rey” fue la ganadora. El director reconoció que el premio “tiene un significado muy particular porque viene de un festival que está en el BioBio, frontera que separó a Chile del Wallmapu. Así que este premio tiene un valor muy importante para poder reconocer esta historia y las implicaciones políticas que tiene la película y que aún están vigentes”. El jurado de la competencia Documental, compuesto por María Nuñez, Francisco Huichaqueo y Fernando Milagros, realizó una mención especial a la obra chilena de Lissette Orozco “El pacto de Adriana”. “En tránsito” se llevó el Tokikura en la categoría Documental a manos de su directora Constanza Gallardo, quien declaró sobre el escenario que “ésta película es para los que somos diferentes, para que no tengamos miedo a los cambios que la lucha transita”. En el festival, la sección de Hecho en Chile y Hecho en BioBio tiene la particularidad de involucrar al público como jurado. “La mentirita blanca” de Tomás Alzamora ganó el premio Hecho en Chile y “Un cuarto para las tres” de Adrian Sobarzo ganó el premio “Hecho en BioBío”. En el transcurso de la ceremonia, se realizó un premio especial desde la muestra de Cin(e)xperiencias al director mapuche Francisco Huichaqueo por su aporte al cine experimental referido a que es el primer director de cine mapuche presente en el festival. Antes de la exhibición de la película final, Francisco Toro Lessen, reconoció el esfuerzo del equipo, en su mayoría está compuesto por jóvenes voluntarios: “Construimos un espacio sincero y honesto (…) Creemos que el cine es la forma que tenemos para cambiar el mundo y es por eso que seguimos haciendo esto. El Trapeñi vino de nuevo, estuvo con nosotros y estoy seguro que en todos nosotros dejó una marca. Ellos son los que permiten que esto ocurra, partimos siendo equipo y terminamos siendo familia”. Con la presencia de sus directores Felipe Elgueta y Ananké Pereira se realizó el pre estreno nacional de la película “Snap” quien fue la encargada de cerrar la sexta versión del festival. Acompañados de Alexa Soto, una de las protagonistas cuyo registro en el documental, muestra su transición. Durante un año Elgueta y Pereira siguieron y registraron 48 cuentas de jóvenes LGTBI, sin comunicarles que eran parte de esta investigación.
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